martes, 4 de diciembre de 2012

[Boletin Conciencia Azul] EL SOL EN TRÍGONO A URANO

 

CAMINO A SER UN INDIVIDUO:

EL SOL EN TRÍGONO A URANO

El signo complementario de Leo, es Acuario; y como suele suceder con las características del opuesto zodiacal a nuestro Sol natal, nos cuesta incorporar sus cualidades encontrándolas por ello brillando o desentonando en los demás. Por tal motivo, Leo suele ir por la vida  alzando los brazos en forma airada, y gritando que está rodeado de locos; declamando que el mundo está  "fuera de su eje"; o que actúa de manera irracional y excéntrica, al punto de desbaratar sus planes, propósitos y proyectos. Mientras luce su digna capa de sangre azul; el león deja claro cuanto adora el estilo "monárquico"; mientras que  Acuario, va en pos del humanitarismo, la fraternidad, la libertad y la igualdad. Por estas diferencias; no es fácil ver a un Leo acatando las convicciones de algún espíritu anárquico; como tampoco nos es imaginable pensar a un revolucionario, vistiendo la corona de un rey. El hecho de ser signos opuestos en el zodíaco, no habla de una franca enemistad; sino de un mutuo aprendizaje que intentará poner delante de nosotros, aquello que más nos cuesta reconocer, haciendo que algún día y sin darnos cuenta, nos encontremos descollando, no por nuestras vestiduras o nuestra rebeldía, sino por  por plantearnos en una posición central a causa de nuestro radicalismo respecto de posturas ajenas a nuestro sí mismo nuclear. Más o menos esta es la idea de lo que sucede cuando los regentes de los signos en oposición, forman algún tipo de aspecto en el cielo; dándose la oportunidad esta vez, de integrar más o menos armoniosamente, dos posiciones que hasta ahora parecían irreconciliables. Como todos tenemos a Leo y a Acuario en algún lugar de la Carta Natal; y como está en vigencia por tránsito un trígono entre el Sol y Urano en el cielo, -y desde los signos de Aries y Leo respectivamente-; tenemos la oportunidad de encontrar la forma más armoniosa de que el autócrata que llevamos dentro; se siente a hablar con el demócrata interior, tratando de llegar a un acuerdo en donde conciliar privilegios y libertades; no sea una utopía sino una realidad. Durante estos días, podemos ir encontrando un cauce distendido por donde vehiculizar el deseo de iniciar algún cambio drástico que refleje nuestra individualidad; reconociendo que el orgullo y la inflexibilidad, no llevan a ninguna parte; pero dejando en claro hasta donde y en qué ámbitos de nuestras vidas, deseamos de corazón alguna reforma de raíz .  Quienes ya tengan en sus temas natales un contacto entre estos dos planetas, podrán resonar con este acorde celeste que vibra en el cielo de estos días, reconociendo una excelente oporutnidad de incorporar a nuestra identidad (trígono de alejamiento y por ende leonino); aquellas facetas que solemos encontrar entorpecedoras cuando son proyectadas a los demás. En lugar de hallarnos con alguien sumamente autoritario a quien oponernos con fuerza anarquista; o quizá toparnos con un loco que desbarate nuestros planes y nos saque de eje; podremos reconocer que las soluciones tenderán a ubicarnos en un lugar que implique  tanto decisiones valientes como nuevas (Urano en Aries, Sol en Leo); y que si bien éstas pueden dejarnos como "la mosca blanca" en una relación o un vínculo cualquiera, -afectivo, ideológico, laboral, familiar, etc.-; nos permitirá sentir una sintonía especial con respecto a temas que involucren de alguna manera a nuestro orgullo, vocación, creatividad, e incluso a a nuestra capacidad de sentirnos uno más con otros. Las casas que tengan en la cúspide a los signos de Leo y Acuario; como así también de Aries y leo; proporcionarán un ámbito en donde poner en juego las energías de la autenticidad y la necesidad de libertad. Por unos días, los cambios que deseemos llevar a cabo, están listos para hacerse posibles; poniendo de manifiesto nuestros deseos de individualidad y originalidad en los ámbitos de experiencia señalados por la Carta Natal donde hallemos dichos signos en sus cúspides. No deberíamos esperar esta vez, que alguien externo a nosotros aplauda nuestro nuevo posicionamiento; ya que en esta oportunidad; la aprobación viene de ese lugar que nos deja verdaderamente conscientes de ser un individuo con un camino único por recorrer. Toda decisión nacida de aquello que nos hace singulares; no suele estar acompañada de bombos y platillos; pues ser cada día más uno mismo; tiene la particularidad de aquello que no puede copiarse y que nadie nos puede facilitar. Es un acto creativo; y la creación se define por ser nacida de algo que nunca antes había existido. Hasta el 31 de julio, transcurre un excelente momento para poder aplicar en forma concreta este espíritu innovador; y hasta el 8 de agosto, podremos disfrutar de la sensación de libertad que como una estela, queda flotando en el aire. Carpe diem!

No hay comentarios:

Publicar un comentario